!Llegó la revolución! MANÁ
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Fher,
la voz líder de Maná, es uno de los sellos característicos de la
agrupación mexicana. Junto a Alex, el baterista, ha compuesto la mayoría
de las canciones de la banda.
AFP | El Pais
Además de sus grandes éxitos el cuarteto mexicano presentará a los
caleños su más reciente producción, Revolución de Amor, en la que contó
con la colaboración de Carlos Santana y Rubén Blades. Una muestra de que
evolucionar no significa olvidar la raíz.
Lo primero que deben reconocer todos los que están emocionados con el
concierto de hoy es que a los colombianos Maná ya no nos gusta tanto.
Al menos no desde el pasado 23 de febrero, cuando se llevó el Grammy que
muchos le habíamos entregado por adelantado a Juanes. Dolor de patria se
llama eso. |
Lo segundo que hay que
admitir, sin pretender desconocer el enorme talento de Juanes, es que el
premio de Mejor Album de Rock Latino fue correctamente adjudicado por los
miembros de la academia - aunque aquí digamos que muchos son mexicanos - y
representa un justo reconocimiento para una agrupación que ya es patrimonio
musical de toda Latinoamérica.
Hace cinco años Maná no entraba a un estudio para grabar una nueva
producción. En todo ese tiempo, sin embargo, sus integrantes se las
arreglaron para permanecer en el corazón y el oído del público.
No fue un tiempo perdido: un 'unplugged' de MTV, una alianza exquisita con
Santana y presentaciones en centenares de festivales y conciertos en Europa
y América los mantuvieron en primeros lugares de preferencia entre la gente
joven.
Popularidad a la que también contribuyó el trabajo en pro de la causa
ecológica, a través de su fundación Selva Negra.
Puede señalarse entonces que en todo ese tiempo Maná fue una banda
"políticamente correcta", una agrupación que estaba "en el lugar apropiado".
Pero, por esa misma razón, la creación de un nuevo disco inédito
representaba un arma de doble filo. Quienes conocen lo difícil que es
alcanzar la gloria, saben muy bien cómo es de fácil perderla.
Lo nuevo. Para regresar Maná, al mejor estilo mexicano, decidió no
complicarse la vida y nos regaló más de lo mismo...gracias a Dios.
Revolución de Amor es un álbum de doce canciones en el que aparecen muchas
cosas nuevas y, sin embargo, permanece el espíritu de ese cuarteto que nació
en los antros rockeros de Guadalajara cuando corrían los últimos días de los
años 70.
En sus inicios la banda se llamó ‘Sombrero Verde’, luego cambió su nombre
por el de Maná, vocablo tomado de un pasaje bíblico que traduce “el pan
caído del cielo”.
Se conserva el sonido rock reggae característico de los grandes éxitos, las
letras son accesibles, los estribillos se quedan en la mente, las guitarras
andan con libertad pero no entran en el terreno de la provocación, la banda
suena tan sólida como ayer y la voz de Fher reivindica, más que nunca, la
profunda influencia que siempre ha recibido de Sting y The Police.
¿Qué nos trae entonces de nuevo este Maná? Varias cosas, a pesar de que
digan lo contrario quienes creen que evolucionar significa romper con la
raíz.
Para empezar, en Revolución de Amor Maná no renuncia a la propuesta
sentimental y romántica que le dio tantos éxitos, pero hace un énfasis mucho
más fuerte en la 'lírica social', en la 'militancia musical' que había
trazado antes con cierta timidez.
Con "Justicia, Tierra y Libertad" Maná les dice a sus miles de seguidores en
Latinoamérica que su música no es de esas que sólo sirve para cantar a coro
en las fiestas, saltar en los conciertos y terminar una noche de juerga.
Capítulo aparte se le deba dar a la guitarra de Santana, quien toca como si
esa canción en particular se le hubiera quedado por fuera de su exitoso
álbum `Supernatural'.
Y por otro lado, los mexicanos vuelven el rostro hacia la herencia africana
que también circula por sus venas. La presencia de la percusión afrocubana
es notable a lo largo del disco y, si las emisoras caleñas se hubieran
interesado por algo distinto de lo que venden los promotores, hace rato
estarían radiando el tema "Sábanas frías", donde se logra un matrimonio
delicioso entre el rock y el sabor salsero de Rubén Blades.
Maná regresa a Cali después de conquistar su segundo premio Grammy, y con
una reputación que está muy lejos de la que tenía por allá en sus inicios,
cuando muy poca gente tarareaba sus canciones.
Esta noche, seguramente, además de sus éxitos de siempre, regará en el
escenario toda la energía positiva de su nueva producción. Algo que merece
ser escuchado justo ahora, cuando al mundo le hace tanta falta una
Revolución de Amor.
La discografía
- Maná (1987)
- Falta amor (1990)
- Dónde jugarán los niños (1992)
- Maná en vivo (1994)
- Cuando los ángeles lloran (1995)
- Sueños líquidos (1997)
- Maná MTV unplugged (1999)
- Todo Maná (2000)
- Grandes Maná (2001)
- Revolución de amor (2002)
Por Pedro Navaja
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